Todas las regiones españolas
tienen sus trajes típicos, que se lucen sobre todo, durante sus fiestas
populares. En el caso de Madrid se concentra en chulapos y goyescos.
Chulapas:
Consiste en un vestido de tela de algodón muy ceñido con volantes en los bajos
generalmente de color blanco con topos u otras figuras, este diseño va
acompañado de un mantón de manila cubriendo los hombros, un pañuelo blanco
sobre el pelo recogido y un clavel cuyo número puede variar dependiendo de si
se trata de una mujer casada o soltera.
Chulapos:
Llevan pantalón ajustado de color oscuro que recibe el nombre de alares junto
con una camisa blanca sobre un chaleco del mismo tono, como complemento un
pañuelo blanco atado al cuello llamado safo y una boina en tonos grisáceos
conocida como parpusa.
Goyesca: El
atuendo se compone de un corpiño de terciopelo, mangas con farol en los hombros
y redecilla en la cabeza. Todo el traje suele ir bordado.
Goyesco: Se
compone de una camisa blanca con un fajín, chaqueta corta abotonada y pañuelo
al cuello haciendo juego con el fajín.
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